El gigante surcoreano de la electrónica ha decidido retirar su nuevo Samsung Galaxy Note 7 debido a los diversos incendios que se han producido en terminales de este modelo. De momento se han encontrado 35 baterías defectuosas, que se sobrecalientaron en el momento de la carga del dispositivo.
Aunque este Galaxy todavía no había salido a la venta en España, en el resto del mundo ya se habían comercializado 2,5 millones de unidades. “Calculamos que los terminales que funcionan con la batería problemática no llegan al 0,1% del total vendido. El problema puede ser solucionado con solo cambiar la batería”, anuncia un portavoz de la firma. A pesar de ello, la compañía parará provisionalmente las ventas en varios países y ofrecerá la posibilidad de reemplazar su terminal a todos aquellos que adquirieron el Note 7 por otro modelo de forma temporal.
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