Las cámaras de videovigilancia de Lianyungang, una ciudad al este de China, captaron a un hombre (Cai, de 28 años) pintando nuevas señales de tráfico en la carretera para agilizar así la circulación de los vehículos con el objetivo de que su autobús llegase antes a la parada sin dar tanta vuelta y su entrada al trabajo no se demorase como de costumbre.
Con un bote de pintura blanca en la mano y a las tres de la tarde, con multitud de coche pasando a su alrededor, este joven se dedicó a pintar nuevos carriles, porque según él «en la carretera no hay suficientes carriles para seguir recto y siempre se crea atasco, lo que provoca que su autobus se retrase continuamente«.
La brillante idea le ha supuesto una multa de 1.000 yuanes, unos 112 euros.
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