Con la llegada del periodo estival, no solo se multiplican los robos en viviendas debido a la marcha de los propietarios hacia destinos vacacionales sino que los comerciantes españoles (principalmente del sector minorista) deben estar más alerta, dado que los hurtos en tiendas también crecen durante este periodo de tiempo.
Según datos del Ministerio del Interior, durante el tercer trimestre del año pasado (que abarca desde julio hasta septiembre de 2014) los robos representaron el 27,31% del total del año. Por otro lado, según el último Barómetro Mundial del Hurto en la Distribución patrocinado por la compañía Checkpoint Systems, el índice de pérdida desconocida en España equivale al 1,36% de las ventas, pero se calcula que esta media puede incrementarse hasta un 30% durante la campaña veraniega.
Como era de esperar, productos como cremas protectoras, bronceadoras o hidratantes, gafas de sol, bañadores, chanclas, toallas y similares presentan un mayor riesgo de hurto en las tiendas de las zonas turísticas.
Por todo ello, ante esta oleada de robos, un buen sistema de seguridad podría ahorrar muchas pérdidas.